jueves, 29 de noviembre de 2012

Volver

Otra etapa que termina.
Y el tiempo que no se detiene... Corre, vuela; fluye como agua entre las piedras. Se desvanece entre risas y abrazos. Transcurre rápido y fugaz; impávido y veloz.

A sólo dos meses de mi llegada, es hora de rehacer el equipaje. Y de nuevo, la despedida.

Adiós a semanas de intensas consultas, horas de escucha y consejos recíprocos; a esbozos de sonrisas tras espontáneos comentarios. 
La pequeña habitación se ha convertido en confesionario y búsqueda de soluciones a preguntas sin respuesta. Tras la mesa del consultorio he crecido y rejuvenecido.
Atrás quedan, también, las labores polifacéticas y las desconsideradas maneras de comportamiento; aún persiste cierta falta de educación en algunos sectores. 
Se acabaron aquellas guardias de risas y aleccionamiento, de turnos nocturnos sin llamadas, de invariables comidas indigestas.

Han sido días de aprendizaje y autodidactismo, de buscar incentivos que aporten un atisbo de esperanza a tantas vidas abatidas. Gentes que hacen de su rutina una lucha por la supervivencia, convivientes del dolor, compañeros de la adversidad. 
Rostros y nombres conocidos -ahora sí- que han generado más de un desvelo. Y alguna pérdida, en lo sentimental y en lo corpóreo. 

Fueron momentos de compartir vivencias y costumbres entre tapas y cervezas. Los paseos por Granada, las copas de medianoche. La visita que tanto se hizo esperar :)

El Congreso fue un paréntesis en esta experiencia, una oportunidad para reunirnos en la capital y ofrecernos algo de formación y juergas madrileñas. El reencuentro con viejos amigos convirtió el fin de semana en un retorno al pasado; permitiéndome reparar en que, a pesar del tiempo, la amistad perdura.

Ahora vuelvo a mi realidad, aquélla por la que opté y que en gran parte he echado de menos. Será un regreso temporal; pronto tocará de nuevo hacer maletas. ¿Destino?, la ciudad condal.




viernes, 23 de noviembre de 2012

Así como la noche da paso al día; atrás quedan las largas jornadas de trabajo para, ahora, dar comienzo al esperado fin de semana  :)
Descanso y ocio para todos!! Disfrútenlo!!






martes, 20 de noviembre de 2012

Alma

Nadie conoce tu historia, aunque no sería difícil imaginarla.
Se podría decir que tuviste a bien nacer el día que aquella chica te encontró deambulando por las aceras de su barrio. Las torrenciales lluvias de los días previos te dejaron a las puertas de su casa.
Se desconoce tu origen. Quién sabe si formaste parte de los tantos millones de gotas de agua que cayeron esa tarde...
Sólo se sabe que apareciste en condiciones precarias, como si la propia vida te hubiese pasado por encima. El frío y la humedad se tornaron enemigos, y la fragilidad de tu pequeño cuerpo se vio debilitada.
Aquella mano fue tu amparo y custodia. Los cuidados y la atención que recibiste se convirtieron en la mejor medicina, y tu recuperación fue rápida y evidente.

Es entonces cuando aquellas fotos te acercaron a nosotros...

Y hoy, llegas a casa. Interprétalo como un nuevo renacer.
Sorprende tu confianza y serenidad, y la increíble ternura que inspiras. Te presentas juguetona y aventurera, en una búsqueda incesante de caricias y arrumacos. Eres sigilosa, educada, prudente y discreta. Y todo ello pese a ser tan joven.
De mirada transparente y carácter afectivo, tus actitudes nos conmueven. Tienes "alma" de superviviente.

Nadie conoce tu historia... Pero es ahora cuando nos toca compartirla contigo ^+^









domingo, 11 de noviembre de 2012

Acordes de domingo

Porque hoy es de esos días en que la lluvia y el sofá te invitan a quedarte en casa. 
¡Imposible prescindir de ellos!  :)


miércoles, 17 de octubre de 2012

Rotante sistémica

La alarma del reloj suena; y apenas despuntan los primeros rayos de sol. Granada amanece entre húmedas calles rociadas por aguas públicas. La jornada comienza temprano con sesiones clínicas que ocupan el inicio de la mañana. En ocasiones, hay suerte y tiempo suficiente para compartir un buen café.

Gran parte de la carga asistencial se concentra en las consultas. Allí es donde comencé... todo un reto para mí. De un lado, las diferencias en el manejo del paciente respecto a la planta de hospitalización (tiempos de actuación, enfoque clínico, seguimiento terapéutico...). Del otro, la dificultad añadida de tratarse de un campo de la patología que en gran medida desconozco.
Afortunadamente, el soporte humano facilita mucho el trabajo. El ambiente laboral es cordial y distendido; y no ha resultado complicado encontrar mi lugar en este nuevo entorno.
Tampoco deja de ser peculiar la sensación de estar en casa y sentirse forastera. El reencuentro con viejos compañeros de facultad y antiguos maestros de la Medicina favorece la integración y el desarrollo del quehacer diario.

A día de hoy, nos encontramos rotando por la sección de Enfermedades Sistémicas cuatro residentes: tres de ellos pertenecemos a otros hospitales. Hemos creado un grupo muy simpático y diverso.
Las cañas están a la orden del día. El tapeo se ha convertido en las últimas semanas en mi sustento y dieta habitual. Las relaciones sociales raramente se forjan sin aperitivo de por medio ^+^

La experiencia, positiva en todos los casos, es un puente al aprendizaje y el crecimiento personal. 
El estudio y la preparación de casos y artículos se combinan con los momentos de ocio y vida social.
La convivencia, además, está siendo todo un desafío y puesta a prueba particular. Una gran oportunidad para fortalecer la paciencia y acrecentar la tolerancia. De momento, sin quejas reseñables... ¡¡Seguiremos informando!! 

jueves, 30 de agosto de 2012

Delirios oníricos

Lejos de haber sido una mala guardia; la de ayer no fue mucho más que un esperado re-encuentro laboral.
Trabajar en compañía de amigos siempre hacen más llevaderas las largas horas de desvelo y valoraciones clínicas.

Al caer la noche,  la mayoría se retira a descansar un rato. En esos momentos en los que entras a la habitación, es cuando te percatas de que no hay nada más irritante que verse privado del reposo nocturno.
La asfixiante atmósfera que envuelve el dormitorio dificulta la conciliación del sueño, generándose un estado de "duermevela" en el que eres incapaz de liberarte de la fatiga y el estrés de la jornada. Cualquier ruido se convierte entonces en la génesis de delirios oníricos que te sumergen en una vivencia tan absurda como real. Se vivifican los anhelos más recónditos del subconsciente y te embarcas en un dinámico viaje hacia el mundo de la fantasía y la ficción. Sueños que interpretas y protagonizas bajo tu propio guión. 
Despiertas, y te descubres de nuevo en ese estrecho e incómodo colchón, con las sábanas hasta la barbilla porque a alguien se le ocurrió de madrugada "acondicionar" el habitáculo.

Son las 10 am. Como en cada saliente, aprovecho para comprar en una frutería cercana. Acostumbro a llevarme siempre el mismo género. Esta vez me sorprende que el tendero me recuerde. Reconoce -además- los mismos pantalones rojos que llevaba hace un par de semanas. Entablamos una breve conversación en la que infiere conclusiones a partir del color de mi ropa. Salgo de la tienda y reflexiono acerca las civilizaciones, las culturas y la forma de proyectarnos al mundo.

¿Cómo es la percepción desde fuera?.
Pasaré otro día a preguntar.



lunes, 27 de agosto de 2012

... Dejarse llevar...

Una gélida brisa entraba por la ventana. Eran días en los que -afortunadamente- el tiempo había concedido una tregua a la ciudad. El bochornoso calor del verano retrocedía a favor de unos vientos alisios que llegaban cargados de humedad y esencias.
El rocío matutino empañaba los cristales de su habitación, y a través de aquéllas cortinas de seda se colaba ese aroma del algarrobo que le recordaba a su niñez.
Sola, sobre su cama, doblaba meticulosamente la ropa que pretendía usar durante los próximos meses.

La maleta iba repleta. Debería prescindir de aquella cazadora que tanto le gustaba... "¡Ya tendré ocasión de comprarme una nueva!"- pensaba.

Los viajes siempre fueron su pasión: el pretexto perfecto para salir de su rutina, embarcarse en nuevos propósitos o simplemente impregnarse de costumbres y culturas ajenas a ella.

Echó un último vistazo y comprobó que no olvidaba nada. Tan solo dejaba atrás su pequeña y acogedora casa; aquel habitáculo que le proporcionaba su pedacito de intimidad y recogimiento.

Cargó el coche y emprendió rumbo a casa. Su ciudad natal la esperaba inalterable, poderosa y rejuvenecida. El regreso, tras años alejada de su cobijo, se le antojaba ahora todo un desafío. Un lugar cercano y desconocido a la vez.

Cavilaba acerca de su llegada. Y en la innegable desazón que le producía la vuelta,  le acompañaba la convicción de ver cumplidos sus anhelos. Era otro tiempo, pero la misma ciudad. Volvía, esta vez, para dejarse llevar.



domingo, 8 de julio de 2012

Ejecución Sanitaria

Vivimos en tiempos difíciles, de eso no hay duda. Y a pesar de que una marea roja nuble efímeramente nuestra visión, colmando de ilusiones y esperanza el corazón de los españoles; las dificultades económicas siguen ahí.
No hablaré del Ibex 35, de los créditos, ni del déficit público. Ni tan siquiera nombraré a la archiconocida prima de riesgo.
Me referiré, simplemente, a la profunda preocupación que me suscita el problema social que se nos presenta: los recortes en Sanidad.
España, cuyo Sistema Nacional de Salud ha sido ejemplar, garantizando siempre la atención pública e integral de todos los ciudadanos, se haya en este aspecto sobre la cuerda floja.
En la Región de Murcia, los residentes nos convertimos ahora en las nuevas cabezas de turco de las "extraordinarias medidas de ajuste presupuestario". Si ya nos tuvimos que apretar los cinturones hace unos meses, y resignarnos a trabajar jornadas de 24 horas cobrando sólo 17;  se nos insta ahora a reducir nuestro número de guardias en pro del ahorro y la reducción de gastos...
Señores, ¿qué parte de "la Salud es lo primero" no entienden?.
Llegados a este punto, quizá lo razonable sea disminuir la oferta de plazas MIR/FIR/PIR/EIR... o incluso el acceso universitario a estas disciplinas en los años venideros; si es que el problema real -como aventuran algunos- es el exceso de personal sanitario.
No hay derecho a poner en jaque el trabajo y entusiasmo de quienes, desde hace años, hemos invertido un enorme esfuerzo, tiempo y dedicación para formarnos de forma cualificada, científica y humana.
Nosotros (médicos, enfermeros, psicólogos, farmacéuticos) trabajamos para garantizar una atención sanitaria competente, universal y capacitada.
La puesta en marcha de estas medidas garantiza una reducción del coste, sí. El ahorro estatal de más de 1000 horas de formación profesional, de asistencia al paciente y de génesis y cuidados en salud pública.

Tarde de estudio y buena música  ^+^


jueves, 28 de junio de 2012

Aquí y ahora

¿Quién no ha deseado alguna vez poseer el don de la ubicuidad? ¿O adquirir acaso la capacidad de teletransporte?
En mi caso, ocurre con tremebunda frecuencia. Y esta aspiración se pone de considerable manifiesto cuando, tras la oportunidad de un viaje, requiero volver a casa. ¡Qué no daría por encontrarme en ella (con las maletas deshechas inclusive)!

Nunca se me antojó tan grande aquel edificio. Pasé el día recorriendo los largos pasillos que comunican ambos pabellones... Y llegó la hora en la que me convertí en el único ser viviente -amén de los ácaros que se asientan en sus suelos- que transitaba por aquellos emplazamientos. 


Afortunadamente para mí, asistí puntual a la prórroga. Aunque es conocida mi escasa devoción por el deporte español, sí que me complace presenciar los insignes momentos en que se engendra la historia.


En la era de la tecnología, resulta difícil creer que aún nadie haya creado un artilugio de traslación instantáneo. La "final" promete una tregua laboral; de lo contrario habrá que recurrir a la fantasía mental y a la evasión espacio-temporal (qué remedio!!).



domingo, 24 de junio de 2012

Escola d'Estiu

Amanece temprano. Son las 5 am, y el solícito taxista ya espera en nuestra puerta para trasladarnos al aeropuerto.


Sant Cugat del Vallès (San Cucufato en castellano... :s) sólo me era conocida por ser centro de los estudios de Televisión Española en Cataluña. En estos días, se convierte además en escuela que acoge y nutre a un grupo de jóvenes procedentes de distintos puntos de la Península; entre los cuales tengo el privilegio de encontrarme. Se trata de crear un espacio que favorezca acrecentar conocimientos y la relación entre alumnos y profesores.


Son cuatro intensas jornadas de sesiones clínico-patológicas, magistrales conferencias, talleres prácticos y puestas en común. Hay cabida para el diálogo, la discusión científica, las experiencias profesionales y las vivencias personales. El comité organizador apuesta desde su inicio por la participación activa y la interactividad entre los asistentes. 
Y el programa no defrauda.


Han sido, así mismo, días de convivencia e intercambio. Una oportunidad para compartir risas (muchas risas), comidas, fiesta, costumbres e idiosincrasia.


Barcelona vuelve a convertirse en lugar de encuentros y reencuentros. Centro neurálgico de nuevas amistades e inolvidables recuerdos... Quizá por ello es tan difícil despedirse de ella.


La mágica e incandescente noche de San Juan pone cierre a la semana. Entre destellos y pólvora asistimos -atónitas - a un particular juego de cartas. 
La brisa del mar nos devuelve la ilusión. Entierro mis pies bajo la fría arena con la certeza de saber que si "no hay 2 sin 3", tampoco puede haber tres sin cuatro.






martes, 19 de junio de 2012

Consul-storias

Allí, sentada junto a mi adjunto, asisto impresionada a uno de los mejores recitales de poesía. Versos que fluyen a voluntad, e impregnan la pequeña consulta de asombro y fascinación. ¡¡Jamás percibí tanto arte y talento ajeno!!
De la misma manera, presencio -cual fiel espectadora- interesantes conversaciones acerca de la huerta y sus productos. Qué cultivar en qué tiempo y fecha; qué abonos emplear para fortalecer y acelerar el crecimiento de los cultivos. 
Las manos y rostros de quienes por allí pasan reflejan el sufrido trabajo y el castigo de los años.
Octagenarias señoras acuden semestralmente a la revisión "del riñón". Son fervientes devotas de un doctor que las sigue desde hace décadas, y conoce cada una de las historias que encierran.
Algunas  pavonean orgullosas sus "kilotos" de más. Otras se esmeran en apropiarse de síntomas de los que carecen.
También hay tiempo para la Medicina. La consulta se convierte en un incesante tráfico de patología particular.


Entra el siguiente paciente; sólo se acercaba a saludar...


A lo largo de la mañana discurre una veintena de personas por la diminuta sala. Son crónicas diarias de una realidad actual y cercana. Personas con miedos, preocupaciones y ansias de lucha.
Son, en definitiva, auténtico ejemplo de esfuerzo y superación.




viernes, 27 de abril de 2012

De aquéllo que importa

En ocasiones, la vida te enfrenta a determinadas circunstancias que te hacen re-descubrir la importancia de las cosas. Es entonces cuando te das cuenta de que aquel roce en el coche, el mismo que te tuvo un par de noches en vela y más de una mañana descentrada de tu quehacer laboral, pasa a ser una auténtica nimiedad.
Afortunadamente, mi trabajo me ofrece en este sentido un continuo contacto con la dicotomía vida-muerte. Una oportunidad de reflexión constante acerca de la trascendencia de todo cuanto vivimos.


En este sentido, no puede ser fácil para una familia perder a un miembro de tan sólo 21 años como consecuencia de una hemorragia cerebral causada por una malformación arterio-venosa. Como tampoco debe resultar sencillo para un médico solicitar en este estado la donación de los órganos del paciente y, más aún, enfrentarse a la negativa familiar. Y es que, en esta ocasión, una muerte podría haber concedido múltiples vidas...
Así mismo, nunca te acostumbrarás al dolor ajeno; aunque aprendas a sobrellevarlo. Ni -por supuesto- dejará de impresionarte la noticia sobre el óbito premeditado de un conocido.


Vivir de manera intensa y entusiasta es cuanto nos queda. Aprendamos a valorar nuestro día a día; y a nosotros mismos como parte indispensable de este mundo.

sábado, 14 de abril de 2012

Nuevos Horizontes

De nuevo frente al cambio. Ese inseparable aliado que se niega a abandonarme.
Con cada una de sus llegadas resurgen la incertidumbre y la reticencia. La desgana por dejar la seguridad de mi conocido entorno y la motivación de profundizar en una nueva experiencia.

Ésta no iba a ser menos. Y es que ya desde por la mañana temprano, tener que coger el coche supone una ruptura con mi anterior rutina. La sensación de libertad y autonomía me envuelve desde que amanece. 

Mi comienzo fue desde el primer momento considerado y cordial. Allí, en medio de aquel edificio mastodóntico  -centro de referencia de gran parte de nuestra región-, llegué tímidamente; con la cautela de quien cree encontrarse en tierras hostiles. Un desconocido mundo se abría ante mí. 

Apenas son necesarios unos días para percibir que en medio del caos hay manos que acompañan y protegen; que el anonimato invita a sincerarse y sostener conversaciones llenas de esencia y afecto; que hay quienes, igual que tú, luchan por "sobrevivir" en un ambiente extraño y encuentran en las palabras alivio y consuelo.
Es el mismo tiempo que inviertes en aprender a valorar tu ámbito, tus recursos, tu pequeño universo.



viernes, 24 de febrero de 2012

¿Quién soy?

Supongo que a más de uno le ocurrirá que desearía saber, no tanto la opinión de los demás hacia él, como sí la imagen que da al resto de personas con las que se relaciona. Los gestos, las palabras, la indumentaria; la manera de actuar.
A mí me pasa. Y es que no puedo evitar esbozar una sonrisa cuando se me relaciona -así de visu- con determinados grupos sociales o ideologías. ¡¡Y eso que no acostumbro a hablar de política!!

Hoy me crucé con dos personas que andaban paseando sus perros: una venerable anciana y un joven punky de ropa zarrapastrosa. Ambos se encontraban inmersos en una entretenida conversación acerca -obviamente- de sus respectivos canes. Dos generaciones, dos estilos diferentes. En otras condiciones, apuesto que la señora hubiese cambiado de acera al encontrarse a este tipo. Pero "si tiene perro, no debe ser mala persona", solemos pensar.

No son pocas las ocasiones en las que percibo cierto "feeling" con gente que me intuye de una forma que no necesariamente tiene por qué corresponderse con la realidad. Sin dejar de ser nosotros mismos, la proyección que hacemos en los demás influye de manera notoria en las relaciones interpersonales.
Y tú, ¿quién crees que eres?.

miércoles, 22 de febrero de 2012

Lo que quiero ahora

Porque, afortunadamente, hay sentimientos comunes y personas capaces de transmitirlos, de una manera hermosa y sencilla.


"Será porque tres de mis más queridos amigos se han enfrentado inesperadamente estas Navidades a enfermedades gravísimas. O porque, por suerte para mí, mi compañero es un hombre que no posee nada material pero tiene el corazón y la cabeza más sanos que he conocido y cada día aprendo de él algo valioso. O tal vez porque, a estas alturas de mi existencia, he vivido ya las suficientes horas buenas y horas malas como para empezar a colocar las cosas en su sitio. Será, quizá, porque algún bendito ángel de la sabiduría ha pasado por aquí cerca y ha dejado llegar una bocanada de su aliento hasta mí. El caso es que tengo la sensación –al menos la sensación– de que empiezo a entender un poco de qué va esto llamado vida.Casi nada de lo que creemos que es importante me lo parece. Ni el éxito, ni el poder, ni el dinero, más allá de lo imprescindible para vivir con dignidad. Paso de las coronas de laureles y de los halagos sucios. Igual que paso del fango de la envidia, de la maledicencia y el juicio ajeno. Aparto a los quejumbrosos y malhumorados, a los egoístas y ambiciosos que aspiran a reposar en tumbas llenas de honores y cuentas bancarias, sobre las que nadie derramará una sola lágrima en la que quepa una partícula minúscula de pena verdadera. Detesto los coches de lujo que ensucian el mundo, los abrigos de pieles arrancadas de un cuerpo tibio y palpitante, las joyas fabricadas sobre las penalidades de hombres esclavos que padecen en las minas de esmeraldas y de oro a cambio de un pedazo de pan.
Rechazo el cinismo de una sociedad que sólo piensa en su propio bienestar y se desentiende del malestar de los otros, a base del cual construye su derroche. Y a los malditos indiferentes que nunca se meten en líos. Señalo con el dedo a los hipócritas que depositan una moneda en las huchas de las misiones pero no comparten la mesa con un inmigrante. A los que te aplauden cuando eres reina y te abandonan cuando te salen pústulas. A los que creen que sólo es importante tener y exhibir en lugar de sentir, pensar y ser.
Y ahora, ahora, en este momento de mi vida, no quiero casi nada. Tan sólo la ternura de mi amor y la gloriosa compañía de mis amigos. Unas cuantas carcajadas y unas palabras de cariño antes de irme a la cama. El recuerdo dulce de mis muertos. Un par de árboles al otro lado de los cristales y un pedazo de cielo al que se asomen la luz y la noche. El mejor verso del mundo y la más hermosa de las músicas. Por lo demás, podría comer patatas cocidas y dormir en el suelo mientras mi conciencia esté tranquila.
También quiero, eso sí, mantener la libertad y el espíritu crítico por los que pago con gusto todo el precio que haya que pagar. Quiero toda la serenidad para sobrellevar el dolor y toda la alegría para disfrutar de lo bueno. Un instante de belleza a diario. Echar desesperadamente de menos a los que tengan que irse porque tuve la suerte de haberlos tenido a mi lado. No estar jamás de vuelta de nada. Seguir llorando cada vez que algo lo merezca, pero no quejarme de ninguna tontería. No convertirme nunca, nunca, en una mujer amargada, pase lo que pase. Y que el día en que me toque esfumarme, un puñadito de personas piensen que valió la pena que yo anduviera un rato por aquí. Sólo quiero eso. Casi nada. O todo."

Ángeles Caso, Premio Planeta con la Novela  Contra el viento 

martes, 14 de febrero de 2012

En la Prosperidad y en la Adversidad


A vosotros, auténtico testimonio de amor y compromiso, ¡¡FELICIDADES!!

Porque aquel 22 de Octubre decidisteis dar el “sí quiero” a una vida en común, con sus alegrías y dificultades. Una vida basada en la tolerancia y el respeto mutuo.

Vosotros, que de manera responsable habéis formado una familia educada en valores y aptitudes, sois nuestro mejor referente.

¡¡FELICIDADES!! Por descubrirnos que el amor se construye a diario, con esfuerzo y constancia, y que -pese a las adversidades- permanece siempre el deseo de seguir caminando juntos en un mismo sentido. 

A vosotros, que me habéis convencido en todo momento de que es posible vivir en una perpetua “luna de miel”, ¡¡FELICIDADES!!

* Con todo mi cariño, a España y su Reina

martes, 7 de febrero de 2012

"... De todo lo que es mío de ti..."

Ha sido uno de esos días en los que pasaría, frente al volante,  horas y horas conduciendo.
De igual manera que en mis años de adolescente, he recurrido al "viejo" cantante de voz quebrada para que me acompañase durante el viaje. 
El regreso ha estado empañado por un clima de viento y nieve empolvada, convirtiéndose el paisaje en un auténtico panorama digno de admirar. Y mientras me alejaba, te observaba por el retrovisor, espléndida y deslumbrante; envuelta en el mismo manto blanco con que me recibiste.
Me ha alegrado verte de nuevo y descubrirte como siempre. No cambias a pesar del transcurso del tiempo.


Tú, tan cercana aún en la distancia.
Fuente de inspiración de poetas y artistas.
Cuna del flamenco, ciudad de las Ciencias. Reina mora.





sábado, 4 de febrero de 2012

Un toque musical

Qué mejor opción que finalizar la jornada -y la semana- con uno de los grupos que me han acompañado en los últimos días (guardias incluídas) ^+^
Y es que, también en el trabajo, aprendemos a compartir y a poner en común nuestros gustos musicales.
Gracias por el Reggae, el Indie y hasta el más puro Rock*


domingo, 29 de enero de 2012

Balance

Sentada en el suelo de su habitación, sobre aquella jarapa de tinte alpujarreño, desatornilla las patas del que fuera en los tres últimos años su escritorio. Una mesa que fue soporte de libros, papeles y cuentos, y que no volverá a serle útil en su nuevo domicilio.
Mientras realiza el embalaje de todo lo acumulado en este tiempo, sobrevienen al recuerdo infinidad de momentos vividos en aquel piso. Una casa que se concibió para ser compartida y que, hoy, despide sola.
Fiestas de cumpleaños, cenas entre amigos, visitas esporádicas, e incluso las invitaciones a familiares y conocidos que nunca llegaron a visitarla... Los primeras dudas e incertidumbres de quien comenzaba por vez primera a trabajar. La emoción de sentirse fuera de casa. Los éxitos personales y los encuentros inesperados. Las inquietudes, preguntas y conversaciones de sofá. Los sueños más profundos traducidos en una abrumadora realidad. Todo ello fluye y se difunde por cada rincón, impregna las paredes y se concentra en el ambiente.
Pero ha llegado, nuevamente, el momento del cambio. Vuelve a encontrarse de mudanza, ahora en el sentido más estricto de la palabra. Cajas repletas de cuadernos, ornamentos y enseres ocupan su dormitorio. Ha decidido prescindir de lo innecesario, ir ligera de equipaje, dejar hueco a las nuevas cosas que vayan aconteciendo.
Al tiempo que repasa y se organiza para el traslado, recuerda la película de la pasada noche. La misma que había visto por última vez hacía más de 10 años y que -en esta ocasión-  le había supuesto un reencuentro con los fantasmas del pasado. La vida, la muerte, la búsqueda... Pese a los desencuentros y falsas impresiones que había experimentado, era plenamente consciente de las oportunidades que se le brindaban cada día. Tenía un nuevo hogar, y en él seguiría construyendo parte de su persona y su vida.


Recostada en el sofá, sintoniza la radio en que suena una de las canciones de moda en los últimos meses. Cierra los ojos y se deja llevar, evocando una de las frases con la que se quedó dormida la madrugada  pasada: "no te cierres, nunca se sabe; quizá caiga una estrella".



domingo, 22 de enero de 2012

Los Días Raros

Y es que, afortunadamente, aún quedan muchos más regalos por abrir... ^+^


viernes, 20 de enero de 2012

In and Out

Un penetrante pitido rompe mi calma. Despierto. 
Esa intensa pesadez en mis párpados... es la sensación de quien lleva durmiendo durante horas, y en la que el propio cuerpo se resiste a abandonar ese estado de somnolencia y descanso.


Trato de abrir los ojos, lenta y dificultosamente. Entonces descubro ante mí rostros que nunca antes había visto. Semblantes de sorpresa, duda, preocupación. Desvío la mirada hacia uno de los cabeceros de la cama, y encuentro una sonrisa. Gente que dialoga y discrepa. No alcanzo a reconocer ninguna de esas facciones que me escudriñan; no obstante, sus voces me son tan familiares!!!


Me siento fuera de mí. Analizo mi situación y mi estado. 
Me encuentro rodeada de un incómodo cableado que mantiene mi cuerpo inmovilizado sobre la cama. Me afano en desprenderme de todo aquello, sin éxito. Tengo voluntad pero carezco de fuerza y energía. 


Comienzo a percibir el aire enrarecido. No encuentro manera de escapar de allí.
Y de nuevo ese sonido, cada vez más penetrante y ensordecedor. Una multitud se agolpa en torno a mí. Percibo inquietud, desasosiego. Alguien me toma la mano y se me dirige con un habla tranquilizadora.
El tiempo se detiene. Noto fluir ardor en mis venas. Retorno a ese estado de letargo y relajamiento, esa placidez y serenidad por la que, una vez más, me dejo llevar. 

sábado, 14 de enero de 2012

En esencia

No podía imaginar una vida alejada de aquel entorno. El estrecho contacto que -día a día- establecía con la gente, la transportaba a un estado de inmensa paz y bienestar personal. Un afluente de emociones y percepciones positivas se ponían de evidencia en la comodidad de sus actos.
La sequedad del ambiente, las alarmas, los angostos pasillos, e incluso las noches de insomnio, contextualizaban ahora parte de su atmósfera vital. Y le era difícil concebirse fuera de aquel micromundo que se había creado.
Las quejas, preguntas y preocupaciones infundadas no eran de recibo. El dolor ajeno le rozaba a diario; trabajaban mano a mano. Y si en el transcurso de su rutina olvidaba la esencia de lo importante y sustancial, pronto encontraría quien le hiciese retomar el camino.


La vida era su día a día, su presente, su regalo.

domingo, 8 de enero de 2012

Vuelta al cambio

Iba a ser su  primer día de clase. Nuevo centro, nuevos compañeros, nuevos maestros...
Acababa de dejar atrás la comodidad y protección de su antigua escuela; y sentía cierto vacío e inseguridad hacia lo desconocido: una nueva vida se iniciaba.
Mientras su madre le preparaba con esmero la ropa, la pequeña Anna se columpiaba en el jardín de casa, imaginando cómo sería aquel mundo al que en pocas horas habría de enfrentarse.
No obstante, el cambio le seducía. Había conseguido dominar desde hacía rato el "gusanillo" que se removía en su tripa. 
Salió de su ensimismamiento cuando se abrió la ventana del comedor: papá reclamaba su atención. Era el momento de preparar los materiales del día siguiente.
Esa noche cenaría temprano y, tras escuchar el cuento de rigor, dormiría abrazada a su pequeño perro de peluche, soñando que un acogedor y confortable universo se abría ante ella.